LA EPA CONFIRMA EL FRENAZO EN EL CRECIMIENTO DEL TRABAJO POR CUENTA PROPIA EN 2015
- Los autónomos crecieron en 23.200 en 2015 (0,75%) mientras en 2014 lo hicieron en 43.400 (1,4%).
- Este crecimiento del 0,75% contrasta con el importante crecimiento del empleo asalariado que creció en 2015 un 3,5%, casi 5 veces más.
- Además, el crecimiento del trabajo autónomo en 2015 está muy ligado al sector servicios, es especial al turismo, y a las Comunidades Autónomas del mediterráneo.
Madrid, 28 de enero de 2016
Para UATAE, los datos de la EPA aportados hoy por el INE y que corresponden al cuarto trimestre del año 2015 son, sin duda, negativos en términos de trabajadores por cuenta propia ya que indican una significativa desaceleración en el ritmo de crecimiento en comparación con el año anterior. Ello, a pesar de las mejores perspectivas macroeconómicas de 2015 en relación con 2014. En relación al trimestre anterior los autónomos habrían crecido en 6.900, un 0,2%., situando el número total de autónomos al finalizar el año en 3.101.200.
Esta desaceleración del crecimiento del trabajo por cuenta propia es especialmente significativa si lo comparamos con la evolución del empleo asalariado, ya que el crecimiento de los asalariados ha sido casi cinco veces mayor que el de los autónomos; 0,75% los autónomos, 3,5% los asalariados. El empleo globalmente creció un 3% en 2015.
Por sexo, las mujeres por cuenta propia habrían crecido en 14.000, un 1,4%, mientras los varones crecieron en 9.200, un 0,75%, por lo que en 2015 habría mejorado la presencia de la mujer en el trabajo por cuenta propia.
Por Comunidades, son las del mediterráneo las que, en general, tienen un mayor crecimiento, mientras que las del interior en general perdieron autónomos. Los mayores crecimientos se han dado en: Cataluña, 22.600 autónomos más, un 4,4% de incremento; Comunidad Valenciana, 21.400 (6,1%); Baleares, 9.500 (9,4%); Andalucía, 6.800 (1,35%); Galicia, 5.500 (2,5%); Cantabria, 3.500 (8,3%); y Murcia, 2.700 (3,0%). En el País Vasco el crecimiento fue de 500 autónomos, un 0,5%. Por su parte, las mayores pérdidas de autónomos en 2015 se han dado en: Madrid, -10.900 (-3,2%); Navarra, -7.300 (-13,5%); Canarias, -7.300 (-6,0%); Extremadura, -6.800 (-9,1%); Aragón, -4.800 (-5,0%); Castilla y León, -4.600 (-2,3%); Asturias, -4.500 (-6,0%); Castilla la Mancha, -3.600 (-2,5%); y Rioja, -600 (-2,6%).
La evolución del trabajo autónomo durante 2015 ha estado muy ligada al sector servicios, especialmente al turismo. Los autónomos crecieron en 39.300 en los Servicios (1,8%) y en 9.000 en la Construcción (2,8%). Por su parte, disminuyeron en Agricultura, -18.600 (-6,1%), y en Industria, -6.500 (-2,5%).
María José Landaburu, Secretaria General de UATAE, considera “que estos datos no pueden considerarse positivos en relación al trabajo por cuenta propia. Los autónomos han crecido, pero la mitad que el año pasado y su tasa de crecimiento ha sido 5 veces menor que la del empleo asalariado. Además este crecimiento se ha quedado muy lejos de los 100.000 autónomos más que algunos habían pronosticado para el 2015”.
Landaburu añade que “se está produciendo un frenazo en el ritmo de crecimiento del trabajo por cuenta propia, con una creciente rotación y precariedad, y que muchas actividades impulsadas en condiciones económicas anteriores muy difíciles no se están consolidando”.
Landaburu insiste en que “estos datos son negativos para las expectativas de consolidación de la recuperación de la economía española, en la medida que menos autónomos y emprendedores hoy puede significar menos potencialidad de creación de empleo mañana”.
María José Landaburu de UATAE, estima que “es necesario consolidar y aumentar el trabajo por cuenta propia, que no puede ser sólo una salida momentánea ante el desempleo masivo, sino una decisión responsable con un apoyo real y permanente de las administraciones, ya que su aportación es básica para alcanzar mejores resultados en términos de empleo”.
Finalmente, María José Landaburu ha considerado “que esta legislatura debe ser la del apoyo a los autónomos que ya existen, siendo necesario un potente plan para consolidar las actividades, mejorar el acceso a la financiación y realizar una política de segunda oportunidad, mejorando al tiempo la protección de los autónomos mediante un sistema de tributación y cotización en base a los ingresos reales”.